PatrimonioEl hombre habita de manera más o menos estable estas playas desde que se situara en ellas la torre vigía llamada “del catalán”.
Pero antes ya había contribuido a la historia de la humanidad de un modo singular. Algunos de los marineros que acompañaban a Colón eran de esta comarca. Al llegar a América llamaron “Las Antillas” a las islas descubiertas por la similitud entre sus playas.
Anécdotas aparte, en actualidad La Antilla es uno de los núcleos turísticos más importantes de Lepe. En él viven de modo permanente más de 1500 personas.
Cercanas a esta playa están núcleos más modernos como el de Islantilla que, aunque poseedor de grandes ventajas, carecen de sabor popular que la veteranía de La Antilla le permite poseer.
Su playa, con agua y arena de una calidad insuperable, se llena de tertulias familiares de sol a sol. En ella se pueden realizar múltiples actividades que la convierten en el principal centro de ocio local. Ciertamente enamora al que la visita, que siempre repite.
Cuando ya la luz se atenúa en una de sus maravillosas puestas de sol, muchas familias se recogen a sus casas para cenar. La calma inunda todo en este idílico enclave lepero, quizás ya el último remanso de paz costero de toda la provincia.
