NaturalezaEn el núcleo urbano de El Portil, esta playa se extiende desde La Bota hasta el término municipal de Cartaya. Se trata de una playa familiar, llena de vida en los meses de verano y con servicios cercanos de restauración. Con 3600 metros de longitud y anchura variable que va desde los 40 metros hasta los 10, en las zonas más sometidas a la corriente, la playa de El Portil es una de las más populares de Huelva por ser un centro vacacional de cada vez mayor importancia.
El Portil, antaño asentamiento donde los pescadores pasaban temporadas en modestas cabañas de madera, se ha convertido en la segunda residencia para miles de familias de toda España que la escogen por la enorme belleza de su playa y su excelente urbanización.
Con arena fina y dorada y el agua cristalina se sitúa frente a la creciente Barra del El Rompido y la desembocadura del Rio Piedras. Si a la calidad de su arena, de su agua, a la limpieza y a la hermosura paisajística sumamos la cautivadora luz de la que se puede disfrutar en este lugar, que debe ser lo más parecido al paraíso en la tierra, entenderemos porque atrapa al visitante por siempre.
Históricamente esta zona ha sufrido no solo los envites del viento sino los de los numerosos piratas berberiscos que atacaban las rutas comerciales cercanas. Y este temor a los asaltos e invasiones dura hasta muy poco pues, si es buen observador, podrá comprobar como muchos de los búnkeres construidos por Franco, por temor a una invasión aliada durante la Segunda Guerra Mundial, se mantienen aún en su sitio.
