Levantada entre los siglos XII y el último cuarto del siglo XV, en su fachada lateral permanece una inscripción que la data en el año 1500. Según algunos autores, es posible que aquí pudiera existir una sinagoga anterior al actual templo.
De planta basilical formada por tres naves, su interior delata un origen románico-gótico. En su exterior se deja ver la transición de estilos, debida fundamente a la tardanza típica en la construcción de estos edificios. Delatado queda este hecho por la portada románica con arco conopial en estilo gótico decadente, de uno de sus lados, y la portada de influencia renacentista, en el otro.
Las naves de su interior están separadas por tres hileras de arcos apuntados de ladrillo, en posición transversal a las naves, que reposan sobre columnas de piedra. Pero quizás los elementos de mayor valor de todo el conjunto sean los restos de pinturas murales del siglo XII, que en su día debieron cubrir todos los paramentos del templo.
De especial interés resulta ver, tras la misa en honor a la patrona de Hinojales, a la “Lanza Grande” junto a la “Lanza Chica” danzando en el que puede ser el baile ritual más antiguo, de origen celta, de la provincia de Huelva.