La ermita de San Sebastián, situada en el cerro que predomina sobre el caserío de Villanueva de los Castillejos, ofrece a sus pies unas magníficas vistas de la población y su entorno.
Fue construida esta ermita en honor a San Sebastián a principios del siglo XVIII. Profundamente deteriorada fue rehabilitada y casi construida nuevamente a mediados de la última década del siglo anterior.
Resulta curioso para el visitante verla adosada al cementerio local, ofreciendo ambos una estampa diferente.
Dentro de este sencillo templo hay una imagen del titular, San Sebastián. En las fiestas que se celebran en enero, dedicadas al Santo, el Patrón sube hacia su ermita donde los danzadores le bailan.
La tradición se remonta al siglo XVIII y pervive año tras año, el fin de semana más próximo al 20 de enero.
La mañana del sábado la procesión recorre las calles del pueblo entre las salvas de los escopeteros y la danza de los garrotes. Originalmente era una danza de pastores realizada con sus bastones tradicionales hasta que estos se sustituyeron por garrotes de hierro.