La ermita de Santa María de Consolación es uno de los edificios históricos más antiguos de la Villa de Cartaya. El edificio data del siglo XVI, y según documentos posteriores, fue fundado por parte de un indiano originario de Cartaya. Es un buen ejemplo del barroco andaluz con aportaciones mudéjares.
El edificio se orienta hacia el este, y tiene la forma de un rectángulo irregular con cabecera casi cuadrada. Consta de un buque de tres naves separadas por galerías de tres arcos de medio punto y sustentados por pilares de sección cruciforme. A los pies de la nave central hay un coro sobre bóveda carpanel al que se accede por una escalera situada a los pies de la nave del norte.
El edificio original, que es básicamente el actual, salvo algunos añadidos, es de ladrillo y mampostería con cubierta de madera. En 1755 como consecuencia del Terremoto de Lisboa, el edificio fue reconstruido quedando prácticamente igual al primitivo.